Las rosas son las flores que mejor representan los sentimientos de afecto. Por este motivo, son el regalo más popular en el Día de la Madre, en San Valentín y en aniversarios. Generalmente, cuando queremos demostrar nuestro amor a alguna persona especial optamos por las tradicionales rosas rojas. Sin embargo, debes saber que no hay nada más romántico que optar por algo diferente y único en el mundo que tu pareja nunca haya recibido como regalo.
Podemos encontrar rosas de muchos colores: blancas, rojas, rosas, amarillas, naranjas, malva… Pero lo cierto es que aquel que levanta más pasiones debido a su rareza no es ninguno de estos colores, sino el negro. De hecho, la rosa negra se ha convertido a lo largo de la historia en la obsesión de multitud de escritores y alquimistas, en el paradigma de la oscuridad y de las ciencias ocultas.
¿Alguna vez has visto una rosa negra natural? Lo más seguro es que la respuesta sea «no». Puede que alguna vez hayas visto rosas negras pigmentadas o creadas mediante hibridación de rosas rojas y violetas, vendidas por un alto precio que muchos amantes de lo exótico y lo desconocido están dispuestos a pagar. Y lo cierto es que nunca llegan a alcanzar ese negro sofisticado que buscamos.
Pero debes saber que las rosas negras si existen y pueden encontrarse en la naturaleza. La cuestión es que son ejemplares tan extraños que solamente se desarrollan en un lugar del planeta, la aldea de fantasma de Halfeti, en el sur de Turquía. Son las condiciones únicas del suelo, con una alta concentración de antocianinas, y los niveles de pH de las aguas subterráneas de la zona, que se filtran desde el río Eúfrates, las que permiten que el color rojo carmesí que poseen originariamente estas rosas se convierta en negro al llegar el verano. El resto del año tienen un rojo pronunciado y muy oscuro, pero no negro. Si se altera algún parámetro las flores permaneces rojas. Por este motivo, solamente ocurre en este momento y en este lugar del mundo.
Los habitantes de la población se dieron cuenta de ello cuando en la década de los 90 tuvieron que trasladarse a 10 kilómetros al construirse la presa Birecik, llevando con ellos sus plantas y, por supuesto, sus rosas negras. La cosa es que cuando comenzaron a florecer después de haber sido trasplantadas, sus rosas ya no eran negras, sino rojas. Lo cual resultó fatal para esta especie de la que sólo quedaron algunos ejemplares. En un intento por salvar estas flores únicas en el mundo, las autoridades han instalado invernaderos cerca del pueblo y, por el momento, las rosas han seguido saliendo de color negro.
Los lugareños consideran que sus particulares rosas negras son un símbolo del misterio, la pasión y la esperanza. Los turcos, por su parte, parecen tener una especie de relación de amor-odio con ellas. Y es que, aunque se trata de un fenómeno único en el mundo, la rosa negra es para ellos el símbolo de la muerte y de las mala noticias, y no hay que olvidar que los turcos suelen ser muy supersticiosos con estas cosas. Con lo cual, a pesar de su rareza, los novios en Turquía no suelen regalar rosas de este color a sus novias.
Símbolo de mala suerte para unos o extremadamente valoradas por otros, debemos admitir que estas rosas negras poseen una belleza mística y misteriosa que las hace muy especiales. Ver una rosa negra en plena floración es un espectáculo que muy pocas personas tendrán la oportunidad de ver en la vida. Por eso, si alguna vez decides viajar a Turquía, no dejes de visitar este precioso pueblo.
¿Puedo tener rosas negras en mi jardín?
Si quieres comprar una rosa negra para alguien especial, es muy probable que no puedas darte un viaje hasta Turquía para cogerla. Por eso, la única opción que te queda es optar por los ejemplares híbridos que pueden comprarse en las tiendas o por la variedad Perla Negra que tiene un color rojo tan intenso que llega a parecer negra. Este tipo de rosal crece sin problemas en cualquier jardín, siempre que tenga suelo arenoso y abono orgánico. Además, durante su crecimiento debe mantenerse siempre el suelo húmedo, pero sin dejar que se encharque. También debes añadirle fertilizante especial para rosales al menos dos veces al año, podarlo una vez al año y controlar que no son invadidas por el moho, ya que son muy delicadas. Por supuesto, tampoco debemos permitir que reciban una exposición solar demasiado intensa pues se estropearán con rapidez.
Si no te conformas con rosas en color rojo intenso que llegue a parecer negro, también es posible tener rosas negras en tu jardín agregando un tinte alimenticio al agua de las rosas. Una vez que el rosal haya agarrado y esté sano, mezcla cinco tazas de agua con una cucharada de colorante alimenticio negro y riega las rosas durante 15 días con este preparado, procurando que caiga en medio de la planta. Al pasar un mes, comenzarán a aparecer las primeras rosas negras. Cuando los capullos se hayan abierto, sabrás si tienes que aumentar la cantidad de colorante o si es suficiente con el que has añadido. Este mismo truco puedes también usarlo para potenciar el pigmento negro de las rosas de la variedad Perla Negra.
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